En el Perdigón del Vino existen más de 300 bodegas, hoquedades inmensas horadadas en la tierra por nuestros antepasados a fuerza de pico y pala, herramientas que empleaban alla por el año 1550 , fecha en que se construyeron estas bodegas. Se accede a ellas únicamente por una larga y estrecha escalera horadada en la tierra. Algunas llegan a alcanzar una profundidad de hasta 12 metros.
Estos largos y estrechos laberintos excavados en la tierra, profundos y frescos sirvieron durante siglos para mejor "facer vino" en la oscuridad y el silencio precisos, fermentarlo y conservarlo en unas constantes optimas de humedad y también hoy en día algunas de las bodegas están dedicadas al buen comer con el servicio de carnes a la brasa y buenos vinos.
Estos largos y estrechos laberintos excavados en la tierra, profundos y frescos sirvieron durante siglos para mejor "facer vino" en la oscuridad y el silencio precisos, fermentarlo y conservarlo en unas constantes optimas de humedad y también hoy en día algunas de las bodegas están dedicadas al buen comer con el servicio de carnes a la brasa y buenos vinos.