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Rompe el silencio en la noche,
en la noche del Viernes Santo.
Recia madera de un olmo,
a Cristo muerto vas cantando.
Rompe el silencio del duelo,
la noche del Viernes Santo.
Madera que un carpintero,
trabajara ya hace muchos años.
Año tras año tú fuiste,
en la carrera abriendo paso.
Rompe el silencio en la noche,
la noche del Viernes Santo.
Esto fue escrito un día,
en memoria de aquel, que hiciera,
el carracón con sus manos.
Para romper el silencio,
las noches del Viernes Santo.
en la noche del Viernes Santo.
Recia madera de un olmo,
a Cristo muerto vas cantando.
Rompe el silencio del duelo,
la noche del Viernes Santo.
Madera que un carpintero,
trabajara ya hace muchos años.
Año tras año tú fuiste,
en la carrera abriendo paso.
Rompe el silencio en la noche,
la noche del Viernes Santo.
Esto fue escrito un día,
en memoria de aquel, que hiciera,
el carracón con sus manos.
Para romper el silencio,
las noches del Viernes Santo.
Me ha emocionado, porque yo sé de dos carpinteros que hizieron muchas carracas y varios carracones, que se utilizaron durante muchos años en los Viernes Santos de El Piñero. Hoy día todavía existe la carraca mas pequeña y el carracón mas grande. Este carracón está donado al Museo Etnológico de Zamora y está en proceso de restauración. Espero visitar algún día el museo para verlo.
Gracias Vientodel, por tener este recurdo tan bonito para estos artesanos.
Gracias Vientodel, por tener este recurdo tan bonito para estos artesanos.