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Buenos dias, lo prometido es deuda y estoy haciendo un gran sacrificio que ahora mismo estoy comiendo una humilde manzana... jajaja
No se quien inventó esta tarta, circula por internet desde hace bastante tiempo pero tiene el éxito asegurado, ya que está buenísima. Yo la probé por primera vez hecha por mi cuñada Feli (que es una estupenda cocinera y me pasó la receta) y me pareció lo más exquisito que había comido nunca. Luego mi amiga Ana del foro y blog de cocina en el que participo también dejó la receta y entre mis amigas “cocinillas” tiene mucha aceptación.
Es una receta que a primera vista impone un poco y parece muy complicada, pero no es así, es fácil a más no poder, solo que es muy entretenida.
Ingredientes:
•Un molde de tarta desmontable
•150 gr. de chocolate negro
•150 gr. de chocolate con leche
•150 gr. de chocolate blanco
•3 vasos de leche (600 cc) para la tarta y un chorrito más para la base
•3 bricks de nata líquida de 200 cc.
•3 sobres de cuajada
•Galletas maría (un paquete) para la base
•Mantequilla ó margarina (para la base): a ojo, sin cantidad determinada
•Virutas de chocolate para adornar (o bolitas de cereal bañado en chocolate de tres colores, las venden en todos los supermercados, dónde están los flanes y esas cosas).
Elaboración:
En primer lugar, picar, triturar o “desmigollar” (esta es un “palabro” para la lista porque no viene en el DRAE) las galletas y mezclarlas con la mantequilla blandita y el chorrito de leche hasta obtener una pasta que será la base de la tarta. Extender esta masa en el molde y dejar enfriar en la nevera para que se ponga durito. También se puede hacer con base de bizcocho empapado en almíbar (al gusto)
A continuación se elaboran de cada una de las tres capas de chocolate, es decir que haremos los mismo tres veces, cambiando solamente el tipo de chocolate; cada uno que lo haga a su gusto, a mí la que más me gusta es chocolate negro, blanco en el centro y con leche arriba (queda más vistoso el corte) pero también queda bien en degradado (negro-blanco-conleche). El proceso yo sigo es el siguiente:
PRIMERA CAPA (CHOCOLATE NEGRO):
1. poner 1 vaso de leche a calentar junto con el brick de nata, pero no pondremos todo el vaso, dejaremos un poco de leche aparte (un “culín”) y mientras va calentando disolveremos el sobre de cuajada.
2. Cuando ya vaya calentito, añadiremos los 150 gr. de chocolate para que se vaya disolviendo mientras vamos removiendo para que quede homogéneo.
3. Cuando el chocolate está bien disuelto y a punto de ebullición, añadimos el “culín” de leche con cuajada, lo mezclamos bien y justo en el momento en que hierve, lo volcamos sobre el molde y la base de galletas.
4. Esperamos que cuaje (es bastante rápido) y empezamos con la siguiente capa.
SEGUNDA CAPA (CHOCOLATE BLANCO):
1. El proceso es exactamente el mismo que para la capa anterior: leche, nata, disolución del chocolate y cuajada disuelta en leche, un hervorcito y a volcar sobre la capa de chocolate negro que ya deberá estar cuajada.
2. Truco: para que el chocolate caliente que volcamos sobre el ya cuajado no haga un agujero o se mezcle, volcaremos la mezcla sobre una cuchara para que se reparta uniformemente sobre la capa anterior.
3. Otro truco: algunas veces las capas no se unen y al cortarlo quedan separadas; lo evitaremos si antes de volcar la mezcla, hacemos unas muescas en la capa de abajo, no muy profundas, con un tenedor o la punta de un cuchillo, como si fueran surcos.
TERCERA CAPA (CHOCOLATE CON LECHE).
1. El proceso es exactamente el mismo que para la capa anterior: leche, nata, disolución de chocolate y cuajada, un hervorcito y a volcar sobre la capa de chocolate blanco que ya deberá estar cuajada, con el cuidado de poner la cuchara y hacer los surcos.
2. La capa de chocolate negro es la que cuaja más rápido, por tanto podremos hacer la siguiente casi enseguida, la de blanco es la que tarda más en cuajar y, en principio, parece que queda muy líquida, tened paciencia, que cuaja igualmente, solo que necesitaréis más tiempo antes de seguir con la siguiente capa.
Terminamos la tarta adornándola con virutas de algún chocolate que haga contraste con la capa superior (dependiendo del color que hayáis elegido) ó con bolitas de cereales bañadas en chocolate de tres colores. Al desmoldarlo queda IM-PRESIONANTE, y no hace “plof” os lo garantizo.
Es importante que la cuajada sea buena, yo no quiero dar marcas (que no me dan comisión), pero es esa que todos estáis pensando…, las marcas blancas de cuajada de los diferentes supermercados no siempre dan buen resultado y así no os arriesgáis a comer natillas de chocolate como me pasó a mí la ultima vez por querer ahorrar unos céntimos (que por cierto estaban de p. m. –no lo iba a tirar, claro- pero no era lo que yo quería hacer). En cuanto al chocolate no hay problema de marcas, cualquier super tiene chocolate de “su marca” y siempre me ha quedado bien.
Os repito que es fácil, facilísimo, solo un poco entretenido, pero el resultado es espectacular y, si queréis una presentación diferente: olvidar la base de galletas o bizcochos y utilizar vasitos transparentes individuales, quedan preciosos.
¡Que lo disfrutéis!
No se quien inventó esta tarta, circula por internet desde hace bastante tiempo pero tiene el éxito asegurado, ya que está buenísima. Yo la probé por primera vez hecha por mi cuñada Feli (que es una estupenda cocinera y me pasó la receta) y me pareció lo más exquisito que había comido nunca. Luego mi amiga Ana del foro y blog de cocina en el que participo también dejó la receta y entre mis amigas “cocinillas” tiene mucha aceptación.
Es una receta que a primera vista impone un poco y parece muy complicada, pero no es así, es fácil a más no poder, solo que es muy entretenida.
Ingredientes:
•Un molde de tarta desmontable
•150 gr. de chocolate negro
•150 gr. de chocolate con leche
•150 gr. de chocolate blanco
•3 vasos de leche (600 cc) para la tarta y un chorrito más para la base
•3 bricks de nata líquida de 200 cc.
•3 sobres de cuajada
•Galletas maría (un paquete) para la base
•Mantequilla ó margarina (para la base): a ojo, sin cantidad determinada
•Virutas de chocolate para adornar (o bolitas de cereal bañado en chocolate de tres colores, las venden en todos los supermercados, dónde están los flanes y esas cosas).
Elaboración:
En primer lugar, picar, triturar o “desmigollar” (esta es un “palabro” para la lista porque no viene en el DRAE) las galletas y mezclarlas con la mantequilla blandita y el chorrito de leche hasta obtener una pasta que será la base de la tarta. Extender esta masa en el molde y dejar enfriar en la nevera para que se ponga durito. También se puede hacer con base de bizcocho empapado en almíbar (al gusto)
A continuación se elaboran de cada una de las tres capas de chocolate, es decir que haremos los mismo tres veces, cambiando solamente el tipo de chocolate; cada uno que lo haga a su gusto, a mí la que más me gusta es chocolate negro, blanco en el centro y con leche arriba (queda más vistoso el corte) pero también queda bien en degradado (negro-blanco-conleche). El proceso yo sigo es el siguiente:
PRIMERA CAPA (CHOCOLATE NEGRO):
1. poner 1 vaso de leche a calentar junto con el brick de nata, pero no pondremos todo el vaso, dejaremos un poco de leche aparte (un “culín”) y mientras va calentando disolveremos el sobre de cuajada.
2. Cuando ya vaya calentito, añadiremos los 150 gr. de chocolate para que se vaya disolviendo mientras vamos removiendo para que quede homogéneo.
3. Cuando el chocolate está bien disuelto y a punto de ebullición, añadimos el “culín” de leche con cuajada, lo mezclamos bien y justo en el momento en que hierve, lo volcamos sobre el molde y la base de galletas.
4. Esperamos que cuaje (es bastante rápido) y empezamos con la siguiente capa.
SEGUNDA CAPA (CHOCOLATE BLANCO):
1. El proceso es exactamente el mismo que para la capa anterior: leche, nata, disolución del chocolate y cuajada disuelta en leche, un hervorcito y a volcar sobre la capa de chocolate negro que ya deberá estar cuajada.
2. Truco: para que el chocolate caliente que volcamos sobre el ya cuajado no haga un agujero o se mezcle, volcaremos la mezcla sobre una cuchara para que se reparta uniformemente sobre la capa anterior.
3. Otro truco: algunas veces las capas no se unen y al cortarlo quedan separadas; lo evitaremos si antes de volcar la mezcla, hacemos unas muescas en la capa de abajo, no muy profundas, con un tenedor o la punta de un cuchillo, como si fueran surcos.
TERCERA CAPA (CHOCOLATE CON LECHE).
1. El proceso es exactamente el mismo que para la capa anterior: leche, nata, disolución de chocolate y cuajada, un hervorcito y a volcar sobre la capa de chocolate blanco que ya deberá estar cuajada, con el cuidado de poner la cuchara y hacer los surcos.
2. La capa de chocolate negro es la que cuaja más rápido, por tanto podremos hacer la siguiente casi enseguida, la de blanco es la que tarda más en cuajar y, en principio, parece que queda muy líquida, tened paciencia, que cuaja igualmente, solo que necesitaréis más tiempo antes de seguir con la siguiente capa.
Terminamos la tarta adornándola con virutas de algún chocolate que haga contraste con la capa superior (dependiendo del color que hayáis elegido) ó con bolitas de cereales bañadas en chocolate de tres colores. Al desmoldarlo queda IM-PRESIONANTE, y no hace “plof” os lo garantizo.
Es importante que la cuajada sea buena, yo no quiero dar marcas (que no me dan comisión), pero es esa que todos estáis pensando…, las marcas blancas de cuajada de los diferentes supermercados no siempre dan buen resultado y así no os arriesgáis a comer natillas de chocolate como me pasó a mí la ultima vez por querer ahorrar unos céntimos (que por cierto estaban de p. m. –no lo iba a tirar, claro- pero no era lo que yo quería hacer). En cuanto al chocolate no hay problema de marcas, cualquier super tiene chocolate de “su marca” y siempre me ha quedado bien.
Os repito que es fácil, facilísimo, solo un poco entretenido, pero el resultado es espectacular y, si queréis una presentación diferente: olvidar la base de galletas o bizcochos y utilizar vasitos transparentes individuales, quedan preciosos.
¡Que lo disfrutéis!