... me parece ver en tus palabras un reproche hacia el chiste que dejé el otro día. Siento que sea así, pues en ningún momento ha sido mi intención molestar a los gallegos. Es un chiste y punto y como tal debe ser tomado, con sentido del humor y creo que los gallegos lo tienen. Me parecen gente (los que conozco y son unos cuantos) maravillosa, acogedora, simpática y muy muy dulce. El chiste (que por cierto no lo he inventado yo y lo tengo porque me lo pasó una amiga de A Coruña, con un gran sentido del humor) era un chiste, podía haberselo adjudicado a un lepero, a un gomero, a un catalán, a un portugués... ¡que se yo! en mi post no hay ningún tipo de "xenofobia". No obstante, si te ha molestado, te pido disculpas si eso te deja más tranquila.
También se, porque tengo familia allí, que en Argentina a españoles nos llaman gallegos; hace 14 años estuve allí visitandola y sus amigos me decían: "mira la gallega que acento más hermoso tiene" (y yo que pensaba que por ser castellana NO tenía acento) Y los argentinos hacen chistes sobre "gallegos" similares a los que aquí contamos de los leperos (algunos muy buenos, por cierto).
A proposito de este asunto, el otro día comentaba con Pepi, que los chistes suelen ser muy crueles a veces: xenófobos, racistas, machistas, feministas... pero que hay que tomarlos con sentido del humor, no pensando que se está ofendiendo a alguien porque si no, la vida sería bastante triste.
Si fueran así las cosas nos encontraríamos con que no podemos contar chistes de curas porque ofendemos a los católicos y "con la Iglesia hemos topado", no podemos contar chistes de gitanos porque nos llaman racistas, ni de mujeres porque nos llaman machistas o de hombres porque nos llaman feministas. No podremos hacer chistes de catalanes, vascos, castellanos, andaluces... No podremos hacer chistes sobre abogados, médicos ó guardias civiles y ni decir tiene que nada de chistes sobre los políticos y menos aún sobre la familia real... ¡que tristeza de vida! ¿no?
En resúmen, que la vida son 4 ratos y no podemos pasar dos serios, tristes y aburridos o con miedo a molestar cada vez que hablemos o escribamos.
Y para quitar hierro al asunto, y con todo el respeto del mundo, os dejo un chiste de gallegos, con la sana intención de arrancaros una sonrisa, que ilumina más que una bombilla y es más barato:
DESPUES DE 25 AÑOS EN ALEMANIA, PEPIÑO, GALLEGO DE UNA ALDEA DE ORENSE (POR EJEMPLO "REBORDACHA", EN HONOR A MI AMIGO ANGEL Y SU MARAVILLOSA FAMILIA) VUELVE A SU PUEBLO NATAL, DONDE ES RECIBIDO POR SUS PAISANOS CON TODOS LOS HONORES. EL CURA DEL PUEBLO LE PREGUNTA (IMAGINENSELO USTEDES CON EL DULCE ACENTO GALLEGO):
- BUENO PEPIÑO ¿QUE TAL TE FUE LA VIDA? DESPUES DE TANTOS AÑOS SUPONGO QUE ADEMAS DE GANARTE LA VIDA, APRENDISTE A HABLAR ALEMAN...
- PUES NO, PADRE, VIVIA EN UN PUEBLO TAN CHIQUITO COMO ESTE, ASI QUE LES ENSEÑE A TODOS A "FALAR GALEGO"
Que paseis buena noche todos. Saludossssssssssssss
También se, porque tengo familia allí, que en Argentina a españoles nos llaman gallegos; hace 14 años estuve allí visitandola y sus amigos me decían: "mira la gallega que acento más hermoso tiene" (y yo que pensaba que por ser castellana NO tenía acento) Y los argentinos hacen chistes sobre "gallegos" similares a los que aquí contamos de los leperos (algunos muy buenos, por cierto).
A proposito de este asunto, el otro día comentaba con Pepi, que los chistes suelen ser muy crueles a veces: xenófobos, racistas, machistas, feministas... pero que hay que tomarlos con sentido del humor, no pensando que se está ofendiendo a alguien porque si no, la vida sería bastante triste.
Si fueran así las cosas nos encontraríamos con que no podemos contar chistes de curas porque ofendemos a los católicos y "con la Iglesia hemos topado", no podemos contar chistes de gitanos porque nos llaman racistas, ni de mujeres porque nos llaman machistas o de hombres porque nos llaman feministas. No podremos hacer chistes de catalanes, vascos, castellanos, andaluces... No podremos hacer chistes sobre abogados, médicos ó guardias civiles y ni decir tiene que nada de chistes sobre los políticos y menos aún sobre la familia real... ¡que tristeza de vida! ¿no?
En resúmen, que la vida son 4 ratos y no podemos pasar dos serios, tristes y aburridos o con miedo a molestar cada vez que hablemos o escribamos.
Y para quitar hierro al asunto, y con todo el respeto del mundo, os dejo un chiste de gallegos, con la sana intención de arrancaros una sonrisa, que ilumina más que una bombilla y es más barato:
DESPUES DE 25 AÑOS EN ALEMANIA, PEPIÑO, GALLEGO DE UNA ALDEA DE ORENSE (POR EJEMPLO "REBORDACHA", EN HONOR A MI AMIGO ANGEL Y SU MARAVILLOSA FAMILIA) VUELVE A SU PUEBLO NATAL, DONDE ES RECIBIDO POR SUS PAISANOS CON TODOS LOS HONORES. EL CURA DEL PUEBLO LE PREGUNTA (IMAGINENSELO USTEDES CON EL DULCE ACENTO GALLEGO):
- BUENO PEPIÑO ¿QUE TAL TE FUE LA VIDA? DESPUES DE TANTOS AÑOS SUPONGO QUE ADEMAS DE GANARTE LA VIDA, APRENDISTE A HABLAR ALEMAN...
- PUES NO, PADRE, VIVIA EN UN PUEBLO TAN CHIQUITO COMO ESTE, ASI QUE LES ENSEÑE A TODOS A "FALAR GALEGO"
Que paseis buena noche todos. Saludossssssssssssss