EL PIÑERO: SU DOLOR...

SU DOLOR

Se acerca el Domingo de Ramos
¡allá vamos! los hijos de El Piñero,
transido de dolor, va el Cordero,
presurosos a su encuentro vamos;

han atado al Maestro las manos
a sus vestidos dijeron: ¡los quiero!
antes de clavar en tosco madero
¡su Cuerpo! ya sin vida, que lloramos.

Oh, Jesús que larga tu agonía
que duro el camino de esa Cruz,
aceptando lo que el Padre, quería.

mas regresas de tinieblas, a la luz
con tu muerte ¡la vida! volvía,
resucitado... eterna plenitud.

Mª JOSE