Aquellos que el sol de agosto dio color y endulzo, estando prendidos a los sarmientos que brotaron en abril, recibieron las aguas de mayo, escucharon en la lejanía los cohetes de la celebración de San Antonio en junio, y el día de la Magdalena se despertaron con el repique de campanas, ese mismo día paso cerca una perdiz con sus polluelos, el polvo del encierro no llego hasta allí, pues este año no se dieron las condiciones sanitarias para que sucediera. En septiembre al despuntar el alba, el rocío de la mañana creaba en ellos perlas negras. Ahora van en los asnales camino del lagar, para quedar adormecidos y reventados, en las tinajas, al abrigo de las inclemencias del tiempo en la panza de las bodegas.
Hola Vientodel.
En algunas ocasiones leo tus mensajes en este foro y, te doy la enhorabuena, por lo bien escritos que están, en este, con pocas palabras haces un inteligente relato del vino, desde que el racimo cuelga del sarmiento y en septiembre, al despuntar el alba, el rocío de la mañana crea en ellos perlas negras, después en las tinajas descansa y reposa en la bodega. Lo dicho, enhorabuena.
En algunas ocasiones leo tus mensajes en este foro y, te doy la enhorabuena, por lo bien escritos que están, en este, con pocas palabras haces un inteligente relato del vino, desde que el racimo cuelga del sarmiento y en septiembre, al despuntar el alba, el rocío de la mañana crea en ellos perlas negras, después en las tinajas descansa y reposa en la bodega. Lo dicho, enhorabuena.