Sangre brava, con diferentes encastes, pero sangre. Que se mantiene en calma hasta que llega la batalla. Por el portón de chiqueros, sale con la sangre de un caste el ejemplar de 537 kg pelajes rojo albardado chorreado entre el morrillo y la testa hasta la badana ociblanco, frentirrojo y astidelantero, de galope ligero y buena alzada de texta, desafiante y buscando pelea de nombre Aguacuco. Dícese, que nació al abrigo de un zarzal a la vera del riachuelo, que lleva por nombre arroyo el cuco. Dicho nombre procede, por pasar el arroyo por la zona de chopos y olmos dónde habitualmente habitan, los que ponen los huevos en nido ajeno. A la misma hora en otro lugar, sale a la arena con bella estampa Vayonero, nacido en los pagos de Vayondo, a la sombra de unos espinos resplandores. De pelo negro listón, Bragado, careto, calcetero y coliblanco. Astifino, sin llegar abrocho de cuerna, y hondo de pechos. Con 595 kg de peso. Sale al paso, llendo a el centro. Fijándose en los burladeros de dónde lo llaman.