EL PIÑERO: Las frías piedras que forman la entrada hueco cerrado...

Las frías piedras que forman la entrada hueco cerrado por la gran puerta de madera agrietada con reseca pintura color grana desgastado por el viento que azota la espadaña en noches de ventisca en invierno, y en horas de mediodía aguantando la fiereza de los rayos del sol en días de verano. Puertas cerradas que en absoluto silencio aguardan en el interior las imágenes que otros años salen en procesion por las calles de El Piñero, memorando con dolor y angustia la pasión y muerte de Cristo.