En las calles y plazas el aroma de las flores, de jardines y macetas se hacía sentir, acompañado de la fragancia en el viento del tomillo de la cantera. Los nubarrones por el Oeste, el sol con el brillo de barruntar agua despuntando por Valdeaguila, las nubes formando torres por el Sur, y las campanas de la Iglesia repicando. De este modo comenzaba el día de la festividad de San Antonio en la Villa de El Piñero. (Feliz día del Santo Patrón)