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¡Que secretos históricos guarda nuestro pueblo! ¡Tú que pasaste tu infancia a la sombra de sus históricas piedras!
Es un resumen sacado del testamento de Men Rodríguez, hacendado de la Aldea del Palo, expedido ante el Notario Real D. Lope Alonso con fecha 16/11/1468 y del testamento de su hijo Rodrigo Rodríguez, hacendado de la Granja de El Piñero, expedido ante el Notario Real D. Pedro López de Zamora, con fecha 17/5/1470.
Escritos en un latín-castellano antiguo muy difícil de traducir al castellano actual.
No sabes bien lo que me alegra que te haya sorprendido y gustado.
Es un resumen sacado del testamento de Men Rodríguez, hacendado de la Aldea del Palo, expedido ante el Notario Real D. Lope Alonso con fecha 16/11/1468 y del testamento de su hijo Rodrigo Rodríguez, hacendado de la Granja de El Piñero, expedido ante el Notario Real D. Pedro López de Zamora, con fecha 17/5/1470.
Escritos en un latín-castellano antiguo muy difícil de traducir al castellano actual.
No sabes bien lo que me alegra que te haya sorprendido y gustado.
Qué gran investigación.
Me quedo sin palabras cada vez que leo cosas tuyas.
Aunque sea un tópico, ya he escrito un libro poemario, ya he tenido hijos, he plantado árboles, lo que me gustaría es saber el lugar exacto donde duermen esas piedras eternas y plantar una acacia allí, seguro que alguien la mimaría.
EL TRINQUETE
El trinquete de muro centenario
testigo de mi infancia.
Está en el calendario
el día que tus piedras se cayeron,
aquel día murieron
las risas infantiles,
la prisa adolescente,
mostrando en el amor la tolerancia.
No apreciaron ese arte
que siempre fue bandera, baluarte
no vieron, no pudieron entender
que formabas parte de nuestro ser.
No pudiste así, pasar a la historia,
de llenarte de gloria,
por tener los mejores pelotaris.
¡Impactante visión
cuando vi derrumbado este frontón!
Recuerdo de las manos las heridas
de nuestros jugadores,
en tardes de domingo en las partidas
y también los sudores
de quien fue campeón.
Ignoramos dónde duerme tu piedra,
y también nos arredra
que tu recuerdo muera en el olvido,
TRINQUETE TAN QUERIDO
de vidas confidente,
por ti va mi recuerdo y devoción.
Noemí
Me quedo sin palabras cada vez que leo cosas tuyas.
Aunque sea un tópico, ya he escrito un libro poemario, ya he tenido hijos, he plantado árboles, lo que me gustaría es saber el lugar exacto donde duermen esas piedras eternas y plantar una acacia allí, seguro que alguien la mimaría.
EL TRINQUETE
El trinquete de muro centenario
testigo de mi infancia.
Está en el calendario
el día que tus piedras se cayeron,
aquel día murieron
las risas infantiles,
la prisa adolescente,
mostrando en el amor la tolerancia.
No apreciaron ese arte
que siempre fue bandera, baluarte
no vieron, no pudieron entender
que formabas parte de nuestro ser.
No pudiste así, pasar a la historia,
de llenarte de gloria,
por tener los mejores pelotaris.
¡Impactante visión
cuando vi derrumbado este frontón!
Recuerdo de las manos las heridas
de nuestros jugadores,
en tardes de domingo en las partidas
y también los sudores
de quien fue campeón.
Ignoramos dónde duerme tu piedra,
y también nos arredra
que tu recuerdo muera en el olvido,
TRINQUETE TAN QUERIDO
de vidas confidente,
por ti va mi recuerdo y devoción.
Noemí
