Que pena que el Castillo esté cerrado. Es una pena que un sitio tan bonito no pueda ser contemplado por los Fermosellanos y por los forasteros. Sin duda era un mirador espectacular, menudas las vistas que tenía. El Ayuntamiento, la Junta o a quien corresponda tendría que interesarse por comprarlo y hacer de él un uso cultural para que todo el mundo pudiera disfrutar de él. Menudas juerguecitas que nos hemos corrido más de alguno-a allí. Madre mía si esas paredes hablaran.