El asentamiento definitivo de Gallegos se pierde en la
historia.
Sabemos que, al igual que el resto de
pueblos de lo que fue el Aliste histórico, en torno al siglo VIII se integra en la Diócesis de Braga.
Tras la reconquista, desde el S. IX, lo administra
Portugal, pero a comienzos del XII la diócesis es recuperada por Braga hasta que, por medio del Tratado de Alcañices, el 12 de septiembre de 1297, se ceden estas tierras al Reino de
León trazándose la línea fronteriza con Portugal.