Con nieblas al amanecer nos saluda este otoño, que quiere diferenciarse del verano que dejamos atrás. El sol será un poco más perezoso cada día, y las noches nos regalaran la escarcha matutina, que volverá del color del oro las hojas de los chopos, para días después dejar desnudas las ramas donde a finales de primavera y en verano, cobijados a la sombra cantaban los ruiseñores. En los zarzales las moras visten su manto negro y en las viñas por la caída de las hojas quedan algo desprotegidos los maduros ... (ver texto completo)