Ya que habláis de
agua, ninguna mejor que la mía, también poseo zarzales, junqueras, chopos y álamos, que proyecta una
sombra fresca. Como veis, soy el espíritu de
Fuente Marina. Sería mejor que se olvidará, o quizás llegado el caso, se aplazara está disputa, entramos en días de
Fiesta de
Navidad, días que debe reinar la paz y el sosiego, en estos
campos, en los cuales el frío es intenso. Por mis alrededores veo, los troncos retorcidos de
almendros desprovistos de sus hojas hasta que llegue febrero
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