¡JOSEFINA, ENVIDIA, DE QUÉ! La
playa es mucha arena y mucha
agua salada, nada más. Tú procura recuperarte, que es lo importante. El
verano dicen que es para las
bicicletas, no es para pensar o escribir en esas tardes desiertas. El calor te anima a descansar y sus blancas y alumbradas mañanas, a pasear. En estos lares, que tenemos la suerte de disponer de excelentes
playas arenosas y, muchos kilómetros, sin construcciones, nos podemos permitir el lujo, de dar largos
paseos por sus finas arenas. A
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