Al que tenían que suspender es al árbitro, que cacicoleó todo lo que quiso haciéndole guiños a ND, hasta no pitó un penalty favorable a
España. Se dice pronto lo mal que lo hizo el hombre.
Pero igual que
Zamora que no se ganó en una hora, la Selección tampoco se dejó ganar por tan mala práxis en el
juego. Eso es porque planeaba por allí, mpor el estadio, un grupo de zamoranos que llevaron la energía, el empeño y el compromiso para los jugadores. Y ganaron