Pero os dejo más sobre Isidro
"Humildísima confesión"
En los últimos años de su vida, cuando Isidro está aquejado por grave enfermedad -tiene unos noventa años-, María vuelve de la
ermita para cuidarle. Próximo a expirar, "hizo humildísima confesión de sus faltas, recibió el Viático y exhortó a los suyos al amor a Dios y al prójimo ' (Gregorio XV)
Su cuerpo lo entierran en el
cementerio de S. Andrés. Se conservó allí incorrupto cuarenta años a pesar de las inclemencias del tiempo. Un
amigo ... (ver texto completo)