Hace poco estuve comiendo en Cáceres en un restaurante que tiene una estrella michelin, y no veas que fracaso. Me parece que se llama El Atrio.
Yo llevo viviendo aquí 24 años y no he ido nunca, a pesar de tener muy buena fama y una de las mejores
bodegas del mundo (sí, sí, del mundo). Pero por
Cáceres, es más fácil
comer mal que comer bien. No es como el norte, ni mucho menos. Y como te descuides te arrean por un chuletón 50 euros y quedas con cara de bobo ¿verdad PON?