Quienes no lo tendrán fácil serán los hijos adoptados por un matrimonio gay. ¿A quién le dan el regalo? ¿o lo dejan en medio del salón y el que lo coja pa él?. Y, en ese caso, agachado en medio del salón, el que iba de padre ¿no corre el riesgo de pasar a ser madre? Que lo deje encima la camilla, que es mejor ¡dónde vas a parar!.