Tenían más paciencia para bordar que el santo job, yo no sé si sería capaz de hacerlo. Y este bordado en rojo, con la altura que tiene el dibujo, les llevaría un montón de tiempo hacerlo. Menos mal que había hecho estas fotos del rodao y todo eso, es la manera de conocer cómo se vestían antes con los trajes típicos. Bueno, espero que hayáis ido todos a la procesión del hincado, a Malva
Me da mucha pena no poder estar por ahí estos días.
Y como dice Ari, yo también me estoy acordando de vosotros. Y esta también es Carmen, de espalda, para enseñar bien su pañuelo de seda, que me dijo que lo había estrenado su abuela. Ya tiene años, pero está impecable.