Cuando Armstrong se unió a la banda de Fletcher Henderson en Nueva York en 1924, descubrió que los músicos neoyorquinos, aunque técnicamente superiores, con frecuencia tocaban en stacatto y sin la emoción de los blues. Armstrong, con sus solos dramáticos y explosivos en la banda de Henderson, tuvo una inmensa influencia al cambiar la manera de frasear solos, abriendo así nuevos caminos de improvisación. Se puede afirmar que Louis Armstrong fue el principal responsable (aunque es probable que hubiera ocurrido eventualmente) por el cambio del énfasis del jazz de improvisación colectiva a solos individuales, lo cual ayudó a la creación del swing.