Oye, no te vayas. ¡Que nos pongan dos galiberios!
Vengan p'acá. El mío flojo, Fito, que te se te va la mano. No te había visto. Llevo enfafao, to la tarde con las cofradías de Míguel y no levanto cabeza. Eso sí, ya no sé si pongo comas, acentos o... ¡que la coma Ramón!. Menuda tareíca tengo con él to las tardes. Paso al ofice que ya van sonando las tripas y tengo que preparar "una olla de algo más vaca que carnero, salpicón las más noches..."