¡Muy intuitivo!
Entremos en faena. Vamos con una crítica creativa a la historia del chocolate.
Creo que no era Pedro el pringa'o que se comió el chocolate roído.
Y que no fue cuando murió la abuela.
Me temo que el pringa'o era yo y el entierro era el de Tía Luisa.
Entremos en faena. Vamos con una crítica creativa a la historia del chocolate.
Creo que no era Pedro el pringa'o que se comió el chocolate roído.
Y que no fue cuando murió la abuela.
Me temo que el pringa'o era yo y el entierro era el de Tía Luisa.
Efectivamente eras tú, el pringao, pero el entierro era de la abuela Pepa, y la que preparó el chocolate era la señora Delfina.