Departieron con la gente como si nos conociéramos de toda la vida. No faltó un señor que preside al Marqués del Bosque y hablaba raro, muy raro. Lo poco que se le entendía eran "fúrbol" y "álbitros". Creo que atiende por Villar Llona, cuando atiende, porque parece estar como ido permanentemente.