Si no fuera por lo que ha tenido de trágico, el asunto del crucero hundido es como de chiste ¿verdad?.
Resulta que el capitán se quiere dar el bacile de pasar al lado del pueblo del maitre y tocar el claxon para... dar en qué pensar a los pastores sería. Igual que lo hacíamos por Malva y alrededores cuando íbamos en el coche y veíamos alguno apoyado en la cayada.
Andaría enganchao con el contramaeste, pescudando cómo arrimarse to’ lo que pudieran y fardar como unos campeones.
- A ver si no va a caber, diría el segundo de a bordo.
- ¡Qué no cabe, dice! Esto lo meto yo como la hostia. Quítate p’allá y verás... ¡Hostia, pues no cabía! ¡me cagüen to!
- ¡Mira que se lo dije, mi capitán, que es usté mu bruto!
El tío va, ahora, y dice que se ha caído en uno de los botes y, por no volver p’atrás con todos sus ocupantes pues que no quiso andar armando más y que se fue a tierra, que le habían hablao mu bien de un bar que había en Giglio y que aprovecharía pa tomarse un birra. Ya, que se fueran salvando los demás como pudieran ¿no?.
Al tío lo llaman al orden pa’ preguntar que qué ha pasao, que si hay víctimas y dice que no sabe, que desde donde está no se ve nada. ¡Vaya espabilao!. Anda que asume el tío, sí, sí. Se limita a decir “ge famos, ge la he liao parda, ¿ge no?”.
De película de dibujos animados.
Resulta que el capitán se quiere dar el bacile de pasar al lado del pueblo del maitre y tocar el claxon para... dar en qué pensar a los pastores sería. Igual que lo hacíamos por Malva y alrededores cuando íbamos en el coche y veíamos alguno apoyado en la cayada.
Andaría enganchao con el contramaeste, pescudando cómo arrimarse to’ lo que pudieran y fardar como unos campeones.
- A ver si no va a caber, diría el segundo de a bordo.
- ¡Qué no cabe, dice! Esto lo meto yo como la hostia. Quítate p’allá y verás... ¡Hostia, pues no cabía! ¡me cagüen to!
- ¡Mira que se lo dije, mi capitán, que es usté mu bruto!
El tío va, ahora, y dice que se ha caído en uno de los botes y, por no volver p’atrás con todos sus ocupantes pues que no quiso andar armando más y que se fue a tierra, que le habían hablao mu bien de un bar que había en Giglio y que aprovecharía pa tomarse un birra. Ya, que se fueran salvando los demás como pudieran ¿no?.
Al tío lo llaman al orden pa’ preguntar que qué ha pasao, que si hay víctimas y dice que no sabe, que desde donde está no se ve nada. ¡Vaya espabilao!. Anda que asume el tío, sí, sí. Se limita a decir “ge famos, ge la he liao parda, ¿ge no?”.
De película de dibujos animados.
Esto parece el mundo al revés, un capitán que pone a salvo su vida antes que la de sus pasajeros y la de su tripulación. Un juez, juzgado por perseguir delincuentes y corruptos, en vez de ser aplaudido por ello. Gobiernos más preocupados por los mercados, que por las personas. Medio mundo se muere de hambre, mientras el resto se pone a dieta, etc, etc, etc..
A mi personalmente todo esto solo me produce náuseas y ni pizca de ganas de reír.
A mi personalmente todo esto solo me produce náuseas y ni pizca de ganas de reír.
Estoy totalmente de acuerdo, madrileña. Acabo de vomitar.
