Dos investigadores de la Universidad de California en Santa Cruz (UCSC), Erik Asphaug y Martin Jutzi, han realizado varias simulaciones por ordenador que implican la existencia de un segundo satélite de la Tierra que se creó también a partir del material eyectado, y que terminó chocando contra la Luna y formando la elevación de las tierras altas de su cara oculta. Dicha elevación no está presente en el lado que vemos desde nuestro planeta, y la razón detrás de esa asimetría impulsa bastantes de los estudios actuales sobre la Luna.