Pues maja el domingo Miguel se fue andando de
Zamora a
Malva a llevarme el peso.
En
Villalube tuvo un pequeño contratiempo, al pasar vio el
Bar de Calleja abierto, y paró a tomar un café.
Hasta ahí bien, pero después del café, vio un pincho de tortilla y no pudo por menos, bueno.
Hay
amigo, que en esto vio salir una cazuela de callos, y claro, que si ponme una tapica, que si aprovecha que ya está manchado el plato, y que que si otros pocos para terminar este vino, otros para este
pan, terminó
... (ver texto completo)