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Resulta que este buen hombre, tenía unos chanchos, que criaba para factura y algún marranito para el asador.
UN buen día le cae una inspección.
El inspector, le pregunta con que alimenta sus cerdos.
El propietario del establecimiento le contesta: Bueno, recojo los desperdicios de los vecinos, y con eso los alimento.
Y bueno, ahí le ponen una multa,
UN buen día le cae una inspección.
El inspector, le pregunta con que alimenta sus cerdos.
El propietario del establecimiento le contesta: Bueno, recojo los desperdicios de los vecinos, y con eso los alimento.
Y bueno, ahí le ponen una multa,
sigue sigue