MALVA: Me lo creo. En invierno se ponía todo de barro que...

Una vez, cuando yo era pequeño, le vendió mi padre un cerdo al Sr. Angélico para la matanza y no veas tu que odisea para cruzar con el animal aquel lodazal.

Me lo creo. En invierno se ponía todo de barro que no había quien anduviera por las calles. Entre las ovejas y los carros, nos tollábamos hasta arriba.
El único que no se manchaba ni la punta del zapato eta mi tio, que llegaba a la iglesia como si no hubiera ido por el mismo camino