A menudo me traslado con la mente a estos parajes donde el viento te corta la cara y el sol quema la piél. Me traslado a mi infancia y me viene el olor de la hierba, de la tierra mojada, de la soledad de algunos parajes, el canto de los pájaros que se oye como nunca en el silencio, Antes te marchabas lejos a buscar kla soledad y el silencio, ahora en esos montes sólo reina el silencio y los animales que se han hecho dueños de él a falta de gente que ande sus caminos. Los corzos ya no tienen qyuien ... (ver texto completo)