Una vez más esaaris cosas de la vida y la muerte se mezclan. Si hace nada la noticia de la muerte de Nis nos sorprendia, ahora más aún la de su hermana Mari. A Natalia un abrazo fuerte, me imagino lo que estará pasando porque la muerte de un hijo es lo peor que te puede pasar en la vida, le deseo que pueda y sepa salir adelante con todo ese dolor.