Peleas de Abajo se queda sin la ayuda del paro por el embargo de la Seguridad Social
La imposibilidad de acceder a los 12.000 euros de la Junta impedirá la contratación de dos trabajadores
10.04.2013 | 10:07
Miembros de la Corporación de Peleas de Abajo, entre ellos el alcalde (primero por la izquierda), durante un pleno. Foto S. R.
S. RAMOS Peleas de Abajo no podrá disponer de los 12.000 euros que le correspondían de la Junta de Castilla y León para paliar el paro en el pueblo, por tener embargado por la Seguridad Social la ayuda que le correspondería del Estado en función del número de habitantes. Con los doce mil euros estaba prevista la contratación de dos trabajadores y de hecho el Ayuntamiento ya había firmado el convenio, al igual que esperaba otro montante económico para el Plan de Obras de la Diputación, al que tampoco tendrán acceso por el mismo motivo aunque si le correspondía ambos programas, tanto por el número de parados que exigía la Junta como por los criterios establecidos por la Diputación.
Esta situación es un suma y sigue ante la encrucijada de endeudamiento que se encontró la corporación actual de independientes al llegar al Ayuntamiento de Peleas de Abajo, una situación que está motivando que dicho grupo esté a punto de tirar la toalla, porque según explican han tenido diferentes encuentros con representantes institucionales tanto de la Administración Regional como de la Diputación e incluso la subdelegada del Gobierno «pero no se ve salida porque nos hacen falta 50.000 euros para conseguir el aplazamiento del embargo y no los tenemos», explica el alcalde, Félix Roncero.
Es precisamente el no estar al corriente del pago lo que ha propiciado que desde que llegaran al Ayuntamiento no hayan recibido un solo euro, excepción hecha de lo que entra a las arcas municipales por la recaudación de impuestos, e incluso de esta partida, tienen embargado el 25% por parte de Caja España que cobra así deudas que mantenía el Consistorio de la anterior etapa cuando presidía el Ayuntamiento Marcelo Jurado. Con el otro 75% de lo recaudado el Ayuntamiento tiene para pagar la luz, la secretaría, el agua «y absolutamente nada más». La delicada situación financiera ha llevado a la Corporación en pensar en solicitar un préstamo bancario firmando los vecinos como avalistas, pero a día de hoy existen dificultades legales para que una corporación local pueda solicitar créditos.
Por si esto fuera poco Roncero afirma que el viernes han recibido notificación de que el anterior mandatario, Marcelo Jurado, no cumplía con la Seguridad Social en la parte que el correspondería por el sueldo que tenía entre 2005 y 2008. «No sé si esta deuda estaba ya contabilizada o si también es algo más añadido que nos reclaman».
La única solución factible sería vender patrimonio municipal, del que carecen, a excepción hecha de la residencia de ancianos, «pero su venta no llegaría para pagar toda la deuda que tiene el Ayuntamiento, habría que desafectarla y no solucionaríamos el problema». A día de hoy es precisamente lo que se intenta salvar desde el Ayuntamiento, cubriendo gastos con lo que abonan los residentes y manteniendo así los puestos de trabajo.
La imposibilidad de acceder a los 12.000 euros de la Junta impedirá la contratación de dos trabajadores
10.04.2013 | 10:07
Miembros de la Corporación de Peleas de Abajo, entre ellos el alcalde (primero por la izquierda), durante un pleno. Foto S. R.
S. RAMOS Peleas de Abajo no podrá disponer de los 12.000 euros que le correspondían de la Junta de Castilla y León para paliar el paro en el pueblo, por tener embargado por la Seguridad Social la ayuda que le correspondería del Estado en función del número de habitantes. Con los doce mil euros estaba prevista la contratación de dos trabajadores y de hecho el Ayuntamiento ya había firmado el convenio, al igual que esperaba otro montante económico para el Plan de Obras de la Diputación, al que tampoco tendrán acceso por el mismo motivo aunque si le correspondía ambos programas, tanto por el número de parados que exigía la Junta como por los criterios establecidos por la Diputación.
Esta situación es un suma y sigue ante la encrucijada de endeudamiento que se encontró la corporación actual de independientes al llegar al Ayuntamiento de Peleas de Abajo, una situación que está motivando que dicho grupo esté a punto de tirar la toalla, porque según explican han tenido diferentes encuentros con representantes institucionales tanto de la Administración Regional como de la Diputación e incluso la subdelegada del Gobierno «pero no se ve salida porque nos hacen falta 50.000 euros para conseguir el aplazamiento del embargo y no los tenemos», explica el alcalde, Félix Roncero.
Es precisamente el no estar al corriente del pago lo que ha propiciado que desde que llegaran al Ayuntamiento no hayan recibido un solo euro, excepción hecha de lo que entra a las arcas municipales por la recaudación de impuestos, e incluso de esta partida, tienen embargado el 25% por parte de Caja España que cobra así deudas que mantenía el Consistorio de la anterior etapa cuando presidía el Ayuntamiento Marcelo Jurado. Con el otro 75% de lo recaudado el Ayuntamiento tiene para pagar la luz, la secretaría, el agua «y absolutamente nada más». La delicada situación financiera ha llevado a la Corporación en pensar en solicitar un préstamo bancario firmando los vecinos como avalistas, pero a día de hoy existen dificultades legales para que una corporación local pueda solicitar créditos.
Por si esto fuera poco Roncero afirma que el viernes han recibido notificación de que el anterior mandatario, Marcelo Jurado, no cumplía con la Seguridad Social en la parte que el correspondería por el sueldo que tenía entre 2005 y 2008. «No sé si esta deuda estaba ya contabilizada o si también es algo más añadido que nos reclaman».
La única solución factible sería vender patrimonio municipal, del que carecen, a excepción hecha de la residencia de ancianos, «pero su venta no llegaría para pagar toda la deuda que tiene el Ayuntamiento, habría que desafectarla y no solucionaríamos el problema». A día de hoy es precisamente lo que se intenta salvar desde el Ayuntamiento, cubriendo gastos con lo que abonan los residentes y manteniendo así los puestos de trabajo.