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Mirador típico
Al igual que las oportunidades no pasan, hay que crearlas; desde el Ayuntamiento local recuperan y transforman una sala del castillo en lugar de reuniones, conferencias o auditorio.
El castillo de Puebla de Sanabria es uno de los mejor conservados de la provincia de Zamora. Ha sido recientemente restaurado y convertido su interior en Biblioteca Municipal y centro de actividades culturales.
Lo mandó construir, a modo de castillo-palacio, Don Rodrigo Alonso Pimentel, cuarto conde de Benavente, miembro de la poderosa nobleza castellana y poseedor de numerosos castillos, en el siglo XV sobre una antigua torre del siglo XIII perteneciente a la familia Losada. La construcción se alargó hasta principios del siglo XVI y prestó buenos servicios a los Reyes Católicos en su lucha con Portugal. En el siglo XVII se amplió con nuevas técnicas de artillería.
Es la plaza había un edificio así con un comercio de los Ochavo, que era ferretería y donde yo compraba las plumas para la pesca de la trucha, en el año que estuve trabajando en esa población.
Esta puerta está en la fachada occidental, es interesante aunque es pequeña de tamaño. Tiene tres arquivoltas de trazado ojival y perfil abocelado. Lo más llamativo son las cuatro estatuas-columnas que sirven de apoyo, otras dos se perdieron, quedando sus huecos. Estas cuatro estatuas están muy desgastadas y representan a personajes que pudieron ser reyes.
La iglesia de Nuestra Señora del Azogue de puebla de Sanabria es el edificio religioso más notable de la Puebla de Sanabria. Su construcción original parece ser del siglo XIII, de estilo románico tardío, de buena sillería berroqueña.

Sin embargo, de esta época sólo se mantienen los muros meridional y occidental, con sus respectivas puertas, ya que el resto es fruto de las consabidas reformas de siglos posteriores (en este caso del XVI)
Edificio bonito dedicado al comercio en la calle principal.
Los balcones y galerías de madera son muy comunes en este pueblo, contribuyendo, en combinación, con la piedra a dar una fisonomía muy característica a las construcciones de la localidad.
Alta torre en elevado lugar desde donde otear el horizonte y desde donde los tañidos de la campana del reloj se extiende con nitidez a gran distancia.
Curioso museo de gigantes y cabezudos que alegraban las calles en las fiestas de nuestra niñez e infundían temor en los pequeños menos atrevidos. Todavía, en este y otros pueblos, llegadas las fiestas estos personajes salen para dar vistosidad y alegría.
Fortaleza renacentista que después de años de abandonado ha sido restaurada y recuperada como centro cultural de la localidad y comarca.
Castillo que perteneció a la familia nobiliaria de los Pimentel, condes de Benavente. Desde esta atalaya renacentista gobernaban sus dominios extendidos por Sanabria.
El pueblo está como un pincel,; no me extraña sea considerado uno de ellos los pueblos más bonitos de España.
La lluvia es buena para el campo
Precioso el pueblo. No lo conocía y me llevé una gratísima sorpresa. Todo muy bonito y acogedor. Ah, y una gastronomía excelente. Totalmente recomendable.