En 1451 la mitad de la villa y toda su tierra es vendida por doña Mayor de Porras a Alonso de Pimentel, tercer conde de Benavente. Este hecho conllevó, además, que el citado conde tomara posesión de su
castillo. A mediados del s. XV, tras extinguirse las dos líneas principales de la
familia Losada (sólo subsistió la rama de los señores de Rionegro),