El
Castillo de los Condes de Benavente, construido sobre una fortaleza plenomedieval a mediados del siglo xv (1455-1499) por Rodrigo Alonso Pimentel, IV conde de Benavente. Ocupa una posición privilegiada dentro del promontorio en el que se asienta el
casco antiguo de la ciudad. Edificado en sillería de granito sobre un recinto de planta cuadrangular, es custodiado por cubos semicilíndricos que están desigualmente distribuidos, un
puente levadizo y todo ello dominado por la gran
torre del
homenaje, interior y exenta, que se conoce popularmente como el Macho.