Hace unos días he recibido un correo electrónico, en el que entre otras cosas leí una hermosa oración, si así se puede llamar, que espero sea de interés para la mayoría de todos aquellos que lo deseéis y que no tengáis oportunidad de entrar en las nuevas tecnologías informáticas.
Solo el título, ya me hace pensar a mí por lo menos, pues todos, creo, andamos actualmente acelerados en los tiempos que nos deparan nuestros días……
Dice así: CALMA MIS PASOS SEÑOR.
Desacelera los latidos de mi corazón, calmando mi mente.
Disminuye mi ritmo apresado con una visión de eternidad del tiempo.
En medio de las confusiones del día a día; dame la tranquilidad de las montañas.
Retira la tensión de mis músculos y nervios con la música tranquilizante de los ríos de aguas constantes que viven en mis recuerdos.
Ayúdame a conocer el poder mágico y reparador del sueño.
Enséñame el arte de tomar pequeños descansos, reducir el ritmo para contemplar una flor, charlar con un amigo, acariciar a un niño, leer un poema, oír una música preferida.
Calma mis pasos Señor, para que yo pueda percibir en medio de la incesante labor cotidiana de los ruidos, luchas, alegrías, cansancios o desalientos, TU presencia constante en mi corazón.
Calma mis pasos Señor, para que yo pueda entonar el cántico de la ESPERANZA, y sonreír para mi prójimo y callarme para escuchar TU VOZ.
Calma mis pasos Señor e inspírame a enterrar mis raíces en el suelo de los valores duraderos de la vida, para que yo pueda crecer hasta las estrellas de mi destino mayor.
GRACIAS SEÑOR por el día de hoy, por la familia que me diste, por mis hermanos de la vida, mi trabajo, y sobre todo por TU presencia en mi vida. Que así sea.
Solo el título, ya me hace pensar a mí por lo menos, pues todos, creo, andamos actualmente acelerados en los tiempos que nos deparan nuestros días……
Dice así: CALMA MIS PASOS SEÑOR.
Desacelera los latidos de mi corazón, calmando mi mente.
Disminuye mi ritmo apresado con una visión de eternidad del tiempo.
En medio de las confusiones del día a día; dame la tranquilidad de las montañas.
Retira la tensión de mis músculos y nervios con la música tranquilizante de los ríos de aguas constantes que viven en mis recuerdos.
Ayúdame a conocer el poder mágico y reparador del sueño.
Enséñame el arte de tomar pequeños descansos, reducir el ritmo para contemplar una flor, charlar con un amigo, acariciar a un niño, leer un poema, oír una música preferida.
Calma mis pasos Señor, para que yo pueda percibir en medio de la incesante labor cotidiana de los ruidos, luchas, alegrías, cansancios o desalientos, TU presencia constante en mi corazón.
Calma mis pasos Señor, para que yo pueda entonar el cántico de la ESPERANZA, y sonreír para mi prójimo y callarme para escuchar TU VOZ.
Calma mis pasos Señor e inspírame a enterrar mis raíces en el suelo de los valores duraderos de la vida, para que yo pueda crecer hasta las estrellas de mi destino mayor.
GRACIAS SEÑOR por el día de hoy, por la familia que me diste, por mis hermanos de la vida, mi trabajo, y sobre todo por TU presencia en mi vida. Que así sea.