Reflexiones sobre los pueblos del Valle y aledaños. Solo hay que echar un vistazo por nuestros pueblos para comprobar su situación. Ver cómo viven sus gentes, el entorno, las viviendas, las calles, los campos, los servicios, las comodidades, el futuro... Etc. Están totalmente desamparados por las Administraciones. No se invierte en el Valle. El futuro para los jóvenes es incierto y poco esperanzador. Las alternativas laborales son escasas. Trabajar en la agricultura, ganadería, comercios y servicios son casi las únicas posibilidades. Existe otra más drástica. La emigración a otras zonas, con lo que se fomenta la despoblación de los pueblos. ¿Y nuestros mayores? Como se conforman con poco y no se quejan, ¡ya está bien! No les falta de nada. Todos tienen su paga y sus pequeñas tierras donde arañan para seguir viviendo. “Que conformista es el carácter zamorano”. Como nos hemos criado con poco, con poco nos conformamos. El Valle se está despoblando, y poco a poco los pueblos van a menos. Los que tuvimos que emigrar a otros países o regiones de España para buscar otras oportunidades, no podemos olvidar a nuestras gentes y nuestras raíces. Tenemos que ser generosos y luchar por nuestro Valle. Nos duele mucho todo lo que hacen, o mejor dicho, todo lo que no hacen los responsables políticos para evitar que los pueblos vivan en la ignominia y acaben desapareciendo. Debemos levantar la voz para que alguien nos escuche y ponga remedio. Emilio (€1000io).