JUEGO PELIGROSO
Hay jóvenes que creen que coquetear de vez en cuando con las drogas, no tendrá consecuencias. Que para divertirse, es preciso “colocarse” un poco. Creen que es un juego que pueden controlar cuando quieran. Pero ¡cuan lejos de la realidad! El consumo aunque sea esporádico, va dejando una huella, una adicción que cuando menos lo esperas, estás “enganchado” y entonces es más difícil dejar de consumir. Sin darte cuenta caes en un pozo sin fondo del que luego resulta muy difícil salir. Es un submundo marginal, oscuro, de consecuencias inimaginables en el que implicas a familiares y amigos. Conozco jóvenes que antes eran personas normales como la mayoría, con un trabajo estable e inquietudes en la vida, con un buen futuro, pero que hoy por haber comenzado a consumir un mal día, no lo pueden dejar y algunos de ellos se han vuelto locos y están internados en centros psiquiátricos, otros en centros de rehabilitación y desintoxicación. Algunos van por la calle deambulando, perdidos, sin rumbo, sin saber si vienen o van, totalmente ausentes de la realidad. Y todo por culpa de haber iniciado un juego peligroso: “el consumo de drogas”. Han destrozado sus vidas y a sus familias. Todos hemos sido jóvenes y también nos divertíamos y lo pasábamos bien sin necesidad de tomar drogas. Tenemos numerosos ejemplos de gentes famosas, conocidos, que han lanzado por la borda su futuro y destrozado sus vidas, comenzando por aquel primer “porro” que les ofreció un colega, o por la pastilla que compró al camello de la discoteca. Posteriormente no han sido capaces de dejarlo y han ido a más. La droga sólo es un negocio para los que trafican y una perdición para el que la consume. Merece la penal hacer una reflexión sobre el consumo de drogas. Seamos sensatos y no caigamos en la trampa. Digamos: ¡NO A LAS DROGAS! €1000io
Hay jóvenes que creen que coquetear de vez en cuando con las drogas, no tendrá consecuencias. Que para divertirse, es preciso “colocarse” un poco. Creen que es un juego que pueden controlar cuando quieran. Pero ¡cuan lejos de la realidad! El consumo aunque sea esporádico, va dejando una huella, una adicción que cuando menos lo esperas, estás “enganchado” y entonces es más difícil dejar de consumir. Sin darte cuenta caes en un pozo sin fondo del que luego resulta muy difícil salir. Es un submundo marginal, oscuro, de consecuencias inimaginables en el que implicas a familiares y amigos. Conozco jóvenes que antes eran personas normales como la mayoría, con un trabajo estable e inquietudes en la vida, con un buen futuro, pero que hoy por haber comenzado a consumir un mal día, no lo pueden dejar y algunos de ellos se han vuelto locos y están internados en centros psiquiátricos, otros en centros de rehabilitación y desintoxicación. Algunos van por la calle deambulando, perdidos, sin rumbo, sin saber si vienen o van, totalmente ausentes de la realidad. Y todo por culpa de haber iniciado un juego peligroso: “el consumo de drogas”. Han destrozado sus vidas y a sus familias. Todos hemos sido jóvenes y también nos divertíamos y lo pasábamos bien sin necesidad de tomar drogas. Tenemos numerosos ejemplos de gentes famosas, conocidos, que han lanzado por la borda su futuro y destrozado sus vidas, comenzando por aquel primer “porro” que les ofreció un colega, o por la pastilla que compró al camello de la discoteca. Posteriormente no han sido capaces de dejarlo y han ido a más. La droga sólo es un negocio para los que trafican y una perdición para el que la consume. Merece la penal hacer una reflexión sobre el consumo de drogas. Seamos sensatos y no caigamos en la trampa. Digamos: ¡NO A LAS DROGAS! €1000io