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QUIRUELAS DE VIDRIALES: LA NIÑEZ EN EL PUEBLO (I)...

LA NIÑEZ EN EL PUEBLO (I)

Difíciles años aquellos que nos tocaron vivir a los niños en la década de los 60 en el pueblo. Éramos pobres. Carecíamos de casi todo; de lo más elemental: Luz eléctrica, agua corriente, radio, tele, teléfono, revistas, tebeos, medios de comunicación, locomoción, comodidades, juguetes, dinero, etc. Todo escaseaba en una pobre economía familiar de subsistencia en un país de la posguerra con pocos recursos económicos, marginado y olvidado por otras naciones. Los niños a la escuela. Eso sí, “los niños con los niños” y “las niñas con las niñas”. En la vieja escuela estudiábamos en voz alta, primero con D. Zacarías y después con D. Francisco. Entonces había muchos niños y niñas en el pueblo. Si nos hubieran preguntado por la situación actual de la población, hubiéramos afirmado con rotundidad, que jamás se llegaría a la situación de despoblación actual. Pero tristemente es la realidad. En la escuela a los niños nos daban leche en polvo, mantequilla y queso americano, que enviaban como ayuda. En casa se comía de lo que se cosechaba en el campo y los productos de la matanza. Casi siempre lo mismo. No teníamos menús variados. Por la mañana, las ricas sopas de ajo y a veces un huevo frito. Al mediodía el típico pote de garbanzos con tocino y un poco de chorizo, y delante sopa de fideos. Para merendar, a veces una simple lechuga con sal y pimentón, o en el mejor de los casos un cacho de pan con chorizo o jamón. Y para la cena, patatas con bacalao. Al día siguiente, más de lo mismo. Y así día tras día hasta llegar a crecer y engordar en Quiruelas. A pesar de las penurias, éramos niños felices. Afortunadamente aquellos años quedaron atrás y los niños de hoy -nuestros hijos y nietos-, con el esfuerzo de todos, pueden vivir mucho mejor, rodeados de todas las comodidades, sin ninguna privación y tan felices o más que nosotros. Así se cumple el viejo dicho: ningún tiempo pasado fue mejor. €1000io