Deciros, que sigue haciendo frio, pero por lo menos ha salido el sol. El finde ha sido un horror; con frio, agua y algo de nieve.
El sábado tenía cena en la zona de Sayago, y no veáis pasando Pereruela los copos de nieve que caían, tremendo.
Bueno espero que empecéis la semana con mucho ánimo.
El sábado tenía cena en la zona de Sayago, y no veáis pasando Pereruela los copos de nieve que caían, tremendo.
Bueno espero que empecéis la semana con mucho ánimo.
Pues aquí, en Bilbao, dice la tele, hemos estado con tiempo casi tropical. No se cuántos grados hemos tenido pero seguro que más de veinte, ¿agua?, bah, la justa, ¿nubes?, ninguna, ¿sol?, sí, el de siempre, alegre y combativo, ¿la gente?, en bañador y camisa floreada, ellos, y con pamela y minishorts estratosféricos, ellas. Pongo la tele y dicen que para hoy suben aún más las temperaturas... jo, qué lata. Preparo el bañador y la toalla y salgo a la calle más feliz que una lombriz... y... todo mi gozo en un pozo... me despierto. Hace un frío del carajo y yo hago un ridículo espantoso. Je je.
Seguro que Txus ha pensado que yo estaba mamao... je je.
Seguro que Txus ha pensado que yo estaba mamao... je je.
Patxi, que ganas tienes que llegue el verano...
Lo tuyo era un sueño, pero yo recuerdo por los sesenta y cinco que el sabado preparabas la cesta para ir a la playa, porque hacia bueno, te despertabas, mirabas a la calle y jarreando, todos los planes al carajo. Otras veces llegabas a la playa con sol, te preparabas tu parcelita, y cuando te disponias a meter el pie al agua, aparecia el nubarron de turno, tenias que taparte con la toalla o recoger por si traia lluvia.
Si llovia, corriendo para la estacion. Aquello era lo mas trepidante. Daros cuenta que todos los que habiamos llegado en varios trenes a lo largo de la mañana, queriamos coger el primero que llegase, habia quien se metia por las ventanas. Por supuesto los trenes eran de madera y via estrecha.
Si yo os contara las peripecias de los viajes en tren de aquellos tiempos...
Para otro dia que tengo sueño. Adios.
Lo tuyo era un sueño, pero yo recuerdo por los sesenta y cinco que el sabado preparabas la cesta para ir a la playa, porque hacia bueno, te despertabas, mirabas a la calle y jarreando, todos los planes al carajo. Otras veces llegabas a la playa con sol, te preparabas tu parcelita, y cuando te disponias a meter el pie al agua, aparecia el nubarron de turno, tenias que taparte con la toalla o recoger por si traia lluvia.
Si llovia, corriendo para la estacion. Aquello era lo mas trepidante. Daros cuenta que todos los que habiamos llegado en varios trenes a lo largo de la mañana, queriamos coger el primero que llegase, habia quien se metia por las ventanas. Por supuesto los trenes eran de madera y via estrecha.
Si yo os contara las peripecias de los viajes en tren de aquellos tiempos...
Para otro dia que tengo sueño. Adios.