He aquí la prueba del delito. Este es el columpio que ha traído de cabeza a la corporación de Manganeses. Observen a los dos paisanos quitando capas de pintura al fuselaje.
Tobogán, Patxi, joder, en qué estás pensando, tobogán, tobogán, tobogán... no columpio sino tobogán, buf, a ver si así se me queda... soy un caso.