¿Donde habra metido el dedo Lorenzo?
Le habrá mordido el mismo caballo blanco que le pisó. Está detrás de él y es muy celoso. Cuando ve niños cerca... se pone muy violento. Lorenzo, para calmarlo, en vez de chuches le pone gasoil y así lo calma. Pero un poco sólo, no creáis, en cuento se le acaba... vuelve a las andadas.