Hoy es un gran día. Estreno la mayoría de edad. Por fin puedo votar, entrar en las discotecas, ver pelis pelín casposas... en fin, ya soy ciudadano de pleno derecho. Tardó en llegar, no creáis; 18 años ni más ni menos pero como todo lo que tarda en llegar, cuando lo hace, sabe mejor. Hoy me voy a matricular para sacar el carnet de conducir porque ya soy mayor. Cuando lo saque, pediré el coche a mi padre para irme de vacaciones con mi novia, una chica de Riego. Ella quiere enseñarme su pueblo... allí vive su abuela Tarsila y tiene mucha familia. Me dice que la Primavera en su pueblo es incomparable, que en el verano el pueblo se llena de niños, en el Otoño, si el Verano se alarga también se disfrutan los días y que el Invierno, buf, el Invierno: ya sabéis, recogimiento, matanza, sopas de ajo y buena pitanza, manta zamorana y brasero.
En fin, ya tengo ganas de conocerlo. Es lo que tiene ser mayor de edad, que uno puede decidir lo que quiere hacer. ¿O no?
En fin, ya tengo ganas de conocerlo. Es lo que tiene ser mayor de edad, que uno puede decidir lo que quiere hacer. ¿O no?