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Esta foto no es de Riego del Camino sino de un pueblecito de Burgos, Bañuelos de Bureba, de unos 200 habitantes y está sacada en el año 1936, triste año en el que unos mataban curas y otros maestros. Pues bien, el maestro que aparece en esta foto se llamaba Antonio y era de Tarragona. Antonio prometió a sus niños que un día les llevaría a ver el mar, su mar, pero... no pudo ser. En los primeros días de Julio unos señores muy serios y armados le dieron "paseillo". Su cuerpo apareció en una fosa común con un tiro en la nuca como tantos otros en los primeros días de la guerra. Sergi Bernal ha escrito un libro de título:" Antoni Benaiges, el maestro que prometió el mar", de editorial Blume, una obra que reconstruye la historia de unos críos a los que arrebataron la ilusión. En el libro, Sergi dice: "Si la primera víctima de la guerra es la verdad, la primera víctima de una Guerra Civil es la esperanza". Joder con la frase!. Y sigue diciendo, "yo no iba a la escuela pues era muy pequeño pero recuerdo que el maestro era amigo de los niños y les enseñaba a pensar, les llevaba de excursión, jugaba con ellos y hasta les compraba comida. Hoy Bañuelos de Bureba, de apenas 30 habitantes, esta semidespoblado. Los chicos de la foto, los que sobrevivieron a la guerra que no fueron todos, emigraron a Baracaldo, Valladolid o Burgos. La mayoría han muerto ya. Sirvan estas notas de homenaje a Antoni Benaiges, maestro de escuela, que en Julio del 36 debía estar de vacaciones en Tarragona y que volvió a Bañuelos para cumplir su promesa. Pero la promesa del mar acabó en una fosa común.