La homilía había comenzado con un párrafo en catalán, con el que Raztinger ha saludado a los Reyes; al arzobispo de Barcelona, Lluís Martínez Sistach, a los cardenales y obispos presentes y a las autoridades nacionales, autonómicas y locales.
Tras el saludo, Ratzinger ha explicado que la consagración de la Sagrada Familia es "el punto cumbre y la desembocadura de una historia de esta tierra catalana que, sobre todo desde finales del siglo XIX, dio una pléyade de santos y de fundadores, de mártires y de poetas cristianos". Una nueva alusión, esta vez más suave, a la Guerra Civil, que ayer produjo estupefacción en el inicio de la segunda visita del Papa a España.
La misa ha terminado con el obispo auxiliar de la Sagrada Familia mostrando a los asistentes el pergamino con el decreto papal que consagra al templo como basílica menor. El obispo lo ha leído, y los asistentes han ovacionado el paseo del documento papal por el altar.
Tras el saludo, Ratzinger ha explicado que la consagración de la Sagrada Familia es "el punto cumbre y la desembocadura de una historia de esta tierra catalana que, sobre todo desde finales del siglo XIX, dio una pléyade de santos y de fundadores, de mártires y de poetas cristianos". Una nueva alusión, esta vez más suave, a la Guerra Civil, que ayer produjo estupefacción en el inicio de la segunda visita del Papa a España.
La misa ha terminado con el obispo auxiliar de la Sagrada Familia mostrando a los asistentes el pergamino con el decreto papal que consagra al templo como basílica menor. El obispo lo ha leído, y los asistentes han ovacionado el paseo del documento papal por el altar.