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Herrera apuntala a Valdeón como «santo y seña» de un PP dialogante y social
La alcaldesa recibe el respaldo sin fisuras del presidente, que llama a superar la abstención y el voto en blanco para lograr la mayoría absoluta
Miércoles 18 de Mayo de 2011
B. G./ M. L. E.
El mitin central del PP de Zamora se desarrolló en un pabellón deportivo y quizá por ello, contagiado del ambiente, Herrera gritó a los suyos antes de subirse al escenario: «Venga, a por ellos». Luego, haciendo caso del cartel que colgaba de fondo con la consigna de campaña, decidió centrarse y lo hizo, sin reservas, sobre Rosa Valdeón y las bondades que la acreditan para ser alcaldesa, esta vez con mayoría absoluta.
Unos minutos antes, el presidente del PP de Zamora, Fernando Martínez Maíllo había jaleado al mandatario regional asegurándole que la de Zamora «es una plaza de primera y te vamos a sacar a hombros». Y si no en hombros, sí en palmitas fue conducida la candidata a lo largo de la intervención de Juan Vicente Herrera. Él mismo avisó al comenzar: su discurso era toda «una declaración de principios» cuyo inicio y final estaba marcado por la actual alcaldesa: «la más dialogante, la más elegante, la de más sensibilidad en las políticas sociales».
Lo cierto es que Valdeón le vino también de miedo a Herrera para combatir el fantasma que agita estos días el PSOE: «el miedo a la derecha, ¿pero alguien puede tener miedo de Rosa Valdeón?», se pregunta Herrera, para a continuación usar a su ex consejera de ejemplo contra otro miedo (y ya van tres), el de los recortes sociales, defendiendo que si el PSOE «es quien cree haber inventado los servicios sociales, somos los del PP quienes los defendemos y los socialistas quienes los recortan».
Hubo un cuarto temor, expresado por la candidata tan cálidamente arropada: «Ya sabéis que soy muy espontánea y que cuando tengo miedo se me nota», confesó durante su intervención, la que cerró el mitin, en contra del orden que suele acontecer en este tipo de actos. Otra deferencia más de Herrera que volvió a gritar a los cuatro vientos, por si alguien todavía no lo había escuchado, que Rosa Valdeón «es una persona importante, querida y de las más valiosas del PP de Castilla y León, lo que es decir del PP de España» y repitió que si la alcaldesa no va también como candidata en las listas autonómicas «fue porque me dio calabazas». Valdeón ha preferido de pretendiente a Zamora y ahora espera la respuesta que saldrá de las urnas este próximo domingo.
Justo cuando Herrera comenzaba a desgranar su declaración a Valdeón (ella sí se atrevió más tarde a utilizar la palabra «amor» que el presidente había cambiado por «principios»), irrumpieron en el pabellón estudiantes del Conservatorio protestando por el retraso en la mejora de las instalaciones. El presidente no sólo no se inmutó sino que le dio la vuelta a la situación: «Vamos a aplaudir a estos jóvenes, buen rollo, buen rollo. En democracia sólo se tiene miedo a los malos Gobiernos (en alusión al de Zapatero, claro), no a los que reivindican, me parece justo que lo hagan». Y reiteró que habrá nuevo conservatorio para Zamora, sí, pero cuando la situación económica lo permita.
« ¿Hay quien tenga miedo de Rosa Valdeón?», insistió Herrera, «sí, los socialistas de Zamora, porque los va a barrer», pronosticó. Y vuelta al miedo y a reivindicar la política social del PP con Rosa Valdeón como «santo y seña». Valdeón se merece «gobernar con la mayoría adecuada para una línea de trabajo coherente», dijo Herrera y calificó a la candidata a la Alcaldía como «la alcaldesa de las sensibilidades sociales», con políticas sobre las que, prometió, su partido no dará «ni un paso atrás», vinculando la sostenibilidad de las mismas a la creación de empleo «que es la mayor política social».
El máximo representante del PP de Castilla y León criticó duramente al ministro José Blanco, a quien atribuyó una broma durante su estancia el lunes en Valladolid: «dijo que con más infraestructuras la gente emigraría más rápido de esta comunidad autónoma, eso es un insulto, un despropósito» del que calificó como «el peor ministro de Fomento del peor Gobierno de la democracia».
Pero estaba claro cuál era el mensaje que Herrera quería transmitir, más allá de la «ilusión y la esperanza» que su partido quiere vender a una sociedad desencantada con los políticos, el último miedo. «La confianza (de los ciudadanos) hay que ganársela». Y los candidatos se enfrentan a la más que probable subida de la abstención y del voto en blanco. «Que nadie se abstenga ni vote en blanco, porque eso es votar al PSOE», advertencia que sirve también para los suyos que estén pensando en quedarse en casa el domingo. Ese día, Herrera ha prometido estar especialmente pendiente de los resultados de Zamora y asegura que una mayoría absoluta de Valdeón sería «el mayor triunfo». Dicho de otra forma, se lo pasaría de miedo.
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La alcaldesa recibe el respaldo sin fisuras del presidente, que llama a superar la abstención y el voto en blanco para lograr la mayoría absoluta
Miércoles 18 de Mayo de 2011
B. G./ M. L. E.
El mitin central del PP de Zamora se desarrolló en un pabellón deportivo y quizá por ello, contagiado del ambiente, Herrera gritó a los suyos antes de subirse al escenario: «Venga, a por ellos». Luego, haciendo caso del cartel que colgaba de fondo con la consigna de campaña, decidió centrarse y lo hizo, sin reservas, sobre Rosa Valdeón y las bondades que la acreditan para ser alcaldesa, esta vez con mayoría absoluta.
Unos minutos antes, el presidente del PP de Zamora, Fernando Martínez Maíllo había jaleado al mandatario regional asegurándole que la de Zamora «es una plaza de primera y te vamos a sacar a hombros». Y si no en hombros, sí en palmitas fue conducida la candidata a lo largo de la intervención de Juan Vicente Herrera. Él mismo avisó al comenzar: su discurso era toda «una declaración de principios» cuyo inicio y final estaba marcado por la actual alcaldesa: «la más dialogante, la más elegante, la de más sensibilidad en las políticas sociales».
Lo cierto es que Valdeón le vino también de miedo a Herrera para combatir el fantasma que agita estos días el PSOE: «el miedo a la derecha, ¿pero alguien puede tener miedo de Rosa Valdeón?», se pregunta Herrera, para a continuación usar a su ex consejera de ejemplo contra otro miedo (y ya van tres), el de los recortes sociales, defendiendo que si el PSOE «es quien cree haber inventado los servicios sociales, somos los del PP quienes los defendemos y los socialistas quienes los recortan».
Hubo un cuarto temor, expresado por la candidata tan cálidamente arropada: «Ya sabéis que soy muy espontánea y que cuando tengo miedo se me nota», confesó durante su intervención, la que cerró el mitin, en contra del orden que suele acontecer en este tipo de actos. Otra deferencia más de Herrera que volvió a gritar a los cuatro vientos, por si alguien todavía no lo había escuchado, que Rosa Valdeón «es una persona importante, querida y de las más valiosas del PP de Castilla y León, lo que es decir del PP de España» y repitió que si la alcaldesa no va también como candidata en las listas autonómicas «fue porque me dio calabazas». Valdeón ha preferido de pretendiente a Zamora y ahora espera la respuesta que saldrá de las urnas este próximo domingo.
Justo cuando Herrera comenzaba a desgranar su declaración a Valdeón (ella sí se atrevió más tarde a utilizar la palabra «amor» que el presidente había cambiado por «principios»), irrumpieron en el pabellón estudiantes del Conservatorio protestando por el retraso en la mejora de las instalaciones. El presidente no sólo no se inmutó sino que le dio la vuelta a la situación: «Vamos a aplaudir a estos jóvenes, buen rollo, buen rollo. En democracia sólo se tiene miedo a los malos Gobiernos (en alusión al de Zapatero, claro), no a los que reivindican, me parece justo que lo hagan». Y reiteró que habrá nuevo conservatorio para Zamora, sí, pero cuando la situación económica lo permita.
« ¿Hay quien tenga miedo de Rosa Valdeón?», insistió Herrera, «sí, los socialistas de Zamora, porque los va a barrer», pronosticó. Y vuelta al miedo y a reivindicar la política social del PP con Rosa Valdeón como «santo y seña». Valdeón se merece «gobernar con la mayoría adecuada para una línea de trabajo coherente», dijo Herrera y calificó a la candidata a la Alcaldía como «la alcaldesa de las sensibilidades sociales», con políticas sobre las que, prometió, su partido no dará «ni un paso atrás», vinculando la sostenibilidad de las mismas a la creación de empleo «que es la mayor política social».
El máximo representante del PP de Castilla y León criticó duramente al ministro José Blanco, a quien atribuyó una broma durante su estancia el lunes en Valladolid: «dijo que con más infraestructuras la gente emigraría más rápido de esta comunidad autónoma, eso es un insulto, un despropósito» del que calificó como «el peor ministro de Fomento del peor Gobierno de la democracia».
Pero estaba claro cuál era el mensaje que Herrera quería transmitir, más allá de la «ilusión y la esperanza» que su partido quiere vender a una sociedad desencantada con los políticos, el último miedo. «La confianza (de los ciudadanos) hay que ganársela». Y los candidatos se enfrentan a la más que probable subida de la abstención y del voto en blanco. «Que nadie se abstenga ni vote en blanco, porque eso es votar al PSOE», advertencia que sirve también para los suyos que estén pensando en quedarse en casa el domingo. Ese día, Herrera ha prometido estar especialmente pendiente de los resultados de Zamora y asegura que una mayoría absoluta de Valdeón sería «el mayor triunfo». Dicho de otra forma, se lo pasaría de miedo.
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