Oh Ayoó, donde nacio mi amor, donde alguno de mis hijos nacieron, donde mi vida empezo, sigo añorando ese
pueblo, porque siento la nostalgia de mi
juventud, y el olor a leña quemada, a
ovejas por las
calles y tambien ariscas
cabras. Recuerdo calles de barros, y
casas repletas de gente, a Don angel el
medico, al secretario Don Pepe, y tambien a Isaac Marmotas el pionero de llevar un medio de trasporte a ese pueblo, tan aislado en otrora, A Don Gabriel el maetro, y tambien al cura don Ezequiel, al
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