El regalaba los coches caros y lujosos, los apartamentos sin pagar alquiler, y un puesto de trabajo en las políticas locales de provincias. También entradas VIP, para la Bunga Bunga, de las fiestas de sexuales entraban por la ranura del buzón, todo a cambio de la compañía para la intimidad. Berlusconi, le agradaba estar siempre rodeado de bellas jóvenes, le regalaba a cambio carísimos regalos, Tendrías que llegar un día a pensar, pongo mi cuerpo en venta por un trabajo?...