ROSETONES Y ÓCULOS
Un
rosetón, palabra proveniente del Latín rosa, es una
ventana circular calada, dotada de
vidrieras, cuya traperiada se dispone generalmente de forma radial.
El rosetón se utilizó principalmente en las
fachadas de
iglesias góticas, alcanzando su mayor esplendor en la
arquitectura de este estilo. En el
románico solía ser de pequeño diámetro y se disponía a modo de óculo en los laterales de las naves. Pero a partir del siglo XIII los rosetones fueron aumentando en tamaño y en complejidad de decoración, hasta llegar a increíbles grados de filigrana pétrea. Pasaron a situarse en las fachadas, por encima de las
portadas, y en cada uno de los frentes del transepto. Las vidrieras se decoraban normalmente con escenas bíblicas en vivos
colores.
Al rosetón se le ha atribuido un doble simbolismo: uno mariano, por la apariencia que tiene de la estructura de una rosa; otro que sugiere a
Cristo, como remedo de los rayos del sol.
Su misión también es doble: por un lado, la más simple de iluminar el interior de los templos; por otro, el conseguir un ambiente misterioso al incidir en el
altar los rayos filtrados por las multicolores vidrieras cuando los rosetones se abren en el imafronte de la nave central.