B. A.
Venialbo celebra hoy su tradicional «Baile del Niño», una fiesta rigurosamente religiosa que se muestra en el lado opuesto de la mascaradas que en estos días inundan la provincia zamorana.
El «Baile del Niño» está incluido dentro de lo que los pueblos llaman las Fiestas de Invierno (Nochebuena, Navidad y los Santos Inocentes) y que, en este caso en Venialbo, se centra exclusivamente en la adoración de Jesús recién nacido.
Los actos darán comienzo a las 13.00 horas con la celebración de la Santa Misa en la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción y al finalizar se celebra el baile-procesión por la calle Tajada donde los danzantes van acompañando con castañuelas y pasos de baile el sonido del tamboril y la dulzaina, mirando siempre hacia el Niño y por tanto bailando siempre de espaldas hasta la ermita del Cristo de la Vera Cruz.
Posteriormente, en la Plaza Negrillo se realizará el «Baile del Floreo» a cargo de un grupo de danzas de la propia localidad. Los quintos eran los encargados hace varios años de escenificar este baile, que ahora es realizado por los propios vecinos de la localidad.
Venialbo celebra hoy su tradicional «Baile del Niño», una fiesta rigurosamente religiosa que se muestra en el lado opuesto de la mascaradas que en estos días inundan la provincia zamorana.
El «Baile del Niño» está incluido dentro de lo que los pueblos llaman las Fiestas de Invierno (Nochebuena, Navidad y los Santos Inocentes) y que, en este caso en Venialbo, se centra exclusivamente en la adoración de Jesús recién nacido.
Los actos darán comienzo a las 13.00 horas con la celebración de la Santa Misa en la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción y al finalizar se celebra el baile-procesión por la calle Tajada donde los danzantes van acompañando con castañuelas y pasos de baile el sonido del tamboril y la dulzaina, mirando siempre hacia el Niño y por tanto bailando siempre de espaldas hasta la ermita del Cristo de la Vera Cruz.
Posteriormente, en la Plaza Negrillo se realizará el «Baile del Floreo» a cargo de un grupo de danzas de la propia localidad. Los quintos eran los encargados hace varios años de escenificar este baile, que ahora es realizado por los propios vecinos de la localidad.